5ª etapa. Coca-Alcazarén. Bitácora.

6 de abril de 2009. Coca-Alcazarén. 23 Kms

Nos levantamos tempranito, a eso de las 7:15 para desayunar todos juntos en «La Estación» y dejar las llaves del albergue. Nada más salir del albergue cruzamos la carretera y nos dirigimos al castillo. En la primera callejuela a la izquierda hay una panadería y compramos unas barras de pan. Desayunamos todos juntos y empezamos a caminar un poco cada uno a su ritmo. Hoy nosotras tenemos algo de prisa porque queremos comer con nuestros padres en Alcazarén para celebrar el cumpleaños de nuestra madre.

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Saliendo de Coca

Así que, por primera vez en esta peregrinación, nos vamos a poner las pilas y vamos a caminar «como unas machotas», pero que no sirva de precedente. Al poco de salir de Coca entramos en un pinar que es un «Aula de Naturaleza». Tiene letreritos con los nombres de las plantas y árboles.

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Iglesia de Villeguillo

El Camino por el pinar se hace bastante placentero. Tenemos una bajadita y luego una subida pero el resto del camino es bastante suave. Hasta Villeguillo vamos con Pilar y Eva, las dejamos tomándose un café en el bar y nosotras apretamos el paso que queremos llegar antes de las tres a Alcazarén.

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La larga llanura castellana

Salimos a una pista larguísima de tierras de cultivos a ambos lados. Un tractor está arando la tierra después de abonarla y tenemos que cubrirnos la boca porque no se puede respirar. Tras la larguísima pista entramos en un nuevo pinar y nos encontramos con el «pifostio» que nos indica que entramos en la provincia de Valladolid. Salimos del pinar y otra inmensa recta nos lleva a un pueblo fantasma.

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Giramos a la izquierda tras pasar un pequeño depósito redondo de agua para bordear el pueblo. Como a unos cuatro kms salimos a la carretera 601. Vamos un ratito por la derecha de la carretera hasta que la podemos cruzar en una raqueta de la que sale la carretera que va a Hornillos de no me acuerdo qué.
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Cruzamos el puente sobre el Eresma y oímos que alguien nos anima a pitido limpio. Son nuestros padres que van siguiéndonos los huellas, animándonos porque Alcazarén está a tiro de piedra, ¡en coche!, claro que andando es otro cantar.

DSC05892A la altura de un restaurante «El Puente», volvemos a cruzar la 601 para seguir por un camino de tierra que entra a Alcazarén a la vista de una iglesia. Seguimos andando en busca del albergue para dejar la comida que nos sobra a los que vienen detrás y sellar. Estos últimos metros los hace mi madre con nosotras mientras mi padre nos sigue con el coche. Sellamos en el Bar Real, nos quitamos las mochila, nos refrescamos los pies con el agua que nos sobra e intentamos hacer de estos minutos una eternidad porque, de momento, y sólo de momento, la primera fase de nuestra peregrinación por el Camino de Madrid hasta Santiago ha llegado al final.

Por el momento.

¡Hermana, todo lo que se empieza, se acaba!

Dos años después…

FOTOGRAFÍAS DE LA ETAPA: